domingo, 23 de agosto de 2015

UN VERANO BASTANTE DURO

Este verano ha sido bastante intenso. Como cada verano nos planteamos los objetivos que creemos más importantes para trabajar en casa.

Este verano han sido varios:
- Dejar el pañal por la noche. 
José Luis lo ha conseguido fácilmente. El temor que yo tenía era que si no aguantaba toda la noche sin hacer pis e hiciera falta levantarle no volviera a conciliar el sueño. Pues para mi sorpresa no ha hecho falta, antes de irse a la cama hace pis. Si tiene ganas de madrugada se levanta ,hace pis y le acompaño a su cama. De momento vamos muy bien. Estoy muy contenta.
- Intentar reducir ansiedad.
Mientras hemos estado de vacaciones ha sido mucho más fácil porque ha tenido menos tiempos muertos y ha quemado muchísima energía. Ha estado muy contento y apenas ha tenido periodos de ansiedad. Pero ahora que ya estamos otra vez en casa vuelve a tener de vez en cuando alguno. Lo que hago es que me tumbo con él y le doy un masaje en la espalda. Intento que esté entretenido con cosas ya sea pintando o haciendo encajables pero no siempre lo consigo. Pero he conseguido que se reduzcan a la mitad.

- Controlar agresividad .
Mi objetivo es que desaparezca por completo la agresividad que tiene José Luis cuando se enfada. Es algo que aún no puede controlar. Se golpea él y a ti si estas cerca. Está claro que es algo que tenemos que seguir trabajando y mucho.

Estos han sido los objetivos que me marqué al comienzo de verano. Pero según ha ido pasando nos hemos encontrado con bastantes sorpresas. La primera es que José Luis quiere jugar con los niños pero su manera de hacerlo no es la más correcta. Le ha dado por empujar a los niños ya sean grande o pequeños. No se da cuenta de que no se juega así . Hice una plantilla en casa donde le indico que no se empuja ni se pega y parece que está funcionando,cruzaremos los dedos. Cuando estamos en el parque y hay niños muy pequeños o que no conozco procuro no dejarle solo para no tener problemas.

Por primera vez José Luis esta sintiendo lo que es el rechazo. El que te acerques a los niños porque te interesa ver lo que están haciendo y que te echen o se vayan dejándote solo. No se hasta que punto puede llegar a entenderlo . Llora y se enfada porque no le dejan participar. A mí me duele el alma cuando veo estas cosas pero son niños y ellos no comprenden a José Luis y no lo hacen con maldad.
Menos mal que aquí donde vivimos todo el mundo le conoce y no tiene problema. Tampoco juegan con ellos pero no le echan ni le aislan.

Se va haciendo mayor y no hace tanta gracia cuando se acerca a la gente para que le digan cosas. Le miran como si fuera un bicho raro.

Y A MI SE ME ESTA AGOTANDO LA PACIENCIA

Para mí emocionalmente este verano ha sido duro, muy duro. Siempre he intentado proteger a José Luis de todas estas cosas y siento que no he podido. No quiero que sufra por la crueldad de la gente.
¿Porqué somos tan crueles? 
¿porque miras a mi hijo como si le perdonaras la vida ?
y sobre todo 
¿PORQUE TENGO QUE IR PIDIENDO PERDÓN POR MI HIJO?

Todas estas preguntan me rebotan en la cabeza. Y estoy más que harta de aguantar a madres emperifolladas con niños repelentes que se piensan que son perfectos y que están por encima de mi hijo.

Querida mama , mira a tu alrededor y fíjate en lo que tienes. En lo que estas criando, en los valores que le estas dando a tu hijo. Fíjate si tu hijo valora más un beso tuyo o que le compres un juego para la play.
Tanto que me miras, fíjate si tu hijo cuando llora lo hace por que no entiende lo que pasa o porque no le quisiste comprar unas chuches.
Te escandalizas si ves que mi hijo me da un golpe, fíjate si lo hace porque se siente mal o porque no le di dinero para que se comprara cromos.

Yo jamás juzgaré tu manera de educar a tu hijo, solo te pido que no me juzgues a mi y mucho menos a mi hijo.